El templo de la Madonna Negra

Rosa Mystica_El templo de la Madonna Negra

La semana pasada te hablaba de la alquimia: qué es la alquimia, sus orígenes y sus principios fundamentales. Te decía que el objetivo principal que tiene la alquimia es transformar el plomo en oro y que, esto, llevado al terreno espiritual, es una invitación a iniciar un viaje de transformación para abrazar tu divinidad. 

La materia prima de la Alquimia

Este proceso se inicia cuando el alquimista decide ir en busca de la materia prima con la que va a trabajar en el laboratorio. Esta materia prima está formada fundamentalmente por dos elementos, dos sustancias principales: la energía masculina o el Rey y la energía femenina o la Reina. Y estas dos sustancias van a ir pasando por diferentes fases hasta llegar a la gran obra… a ese Anthropos o ser andrógino que encarna la divinidad. 

En general, todos los tratados antiguos de alquimia afirman que el proceso de transformación de la materia prima finaliza con tres fases consecutivas: nigredo, albedo y rubedo, que se llaman así por el color que la materia va adquiriendo hasta llegar al dorado. 

Dentro de la espiritualidad femenina, tal y como la compartimos aquí en la Rosa Mystica, estas tres fases están asociadas a tres diosas que nos ayudan a transmitir sus enseñanzas.

  • Nigredo > Negro > Madonna Negra
  • Albedo > Blanco > Virgen Blanca
  • Rubedo > Rojo > Reina Roja

Como sabes, y si no lo sabes te lo cuento ahora, estamos llevando al cuerpo las enseñanzas de estos tres arquetipos femeninos a través de la danza en clases online en directo, todos los miércoles, a las 17h (España). Puedes saber más sobre las clases online en directo aquí>>

La Madonna Negra

Hoy me gustaría hablarte un poquito de la temida Madonna Negra. La Madonna Negra es la primera manifestación del Divino Femenino, la más primal, la que nos conecta con la fuerza erótica femenina.

Hay que entender bien lo que esto significa. Porque hace unos días publicamos un post sobre la danza ritual y sobre cómo podemos hacer alquimia y magia sexual a través del cuerpo en movimiento, y una chica dejó un comentario que me dejó un poco en shock y que decía algo así: ¿es que hay que sexualizarlo y erotizarlo todo, hasta la danza?

Aquí lo primero que yo vi fue una herida acerca de la sexualidad, una herida que es personal, y que ella vino a mostrar, y un herida que que también es colectiva. Porque seguimos sin entender que la sexualidad es una energía de vida y una energía de creación que va más allá de la genitalidad y de conseguir o no poder conseguir orgasmos maravillosos…

Insisto mucho en esto: la energía sexual es la energía con la que se crea la vida, toda la vida. Todo lo que me rodea está creado a partir de esa energía. Y el erotismo es el deseo, esa atracción irresistible que nos lleva a comenzar todo el proceso creativo, y que está impulsado por la vida misma en su anhelo por estar en constante movimiento. 

La Madonna Negra es la base para entender los misterios femeninos. Y no se presenta en nuestra vida como una Musa sensual, sino como una Madre Oscura… y esta madre oscura lo primero que va a darnos es miedo… porque, en Occidente, no estamos acostumbrados a lidiar con los aspectos oscuros del Divino Femenino. 

Para la espiritualidad occidental lo femenino es dulce y sensual, algo a medio camino entre la Venus de Milo y Marilyn Monroe… Y nos da miedo enfrentarnos a esa otra cara del Divino Femenino que es la Madonna Negra porque no se nos muestra sensual, sino que más bien se muestra como una leona, una pantera que viene a mostrarnos la fiereza de la creación, la parte no tan bonita de la creación que nadie nos enseña. 

La fuerza erótica femenina

Y para entender esta fuerza erótica femenina sólo tienes que pensar en una mujer pariendo o en un volcán en erupción. En la erupción del volcán de La Palma en las Islas Canarias, de hace un año, por ejemplo. 

La fuerza erótica femenina primero destruye, abre espacios, para después poder ofrecernos las tierras y las costas más fértiles que jamás hayamos podido imaginar. Los animales primero huyen, algunos mueren en el proceso, y después vuelven porque saben que ese nuevo espacio que se ha creado es el hogar más fértil a donde pueden regresar. 

Y eso no lo entendemos. Pensamos que la naturaleza es mala, que es destructiva, y Ella simplemente está creando en base a unas leyes orgánicas de las que nosotros nos hemos desconectado.

De todos modos, enfrentarnos a la Madonna Negra no es fácil. Cuando se presenta en nuestras vidas, nos exige un sacrificio. Se trata de un sacrificio del ego. Ella viene a mostrarnos lo que no queremos ver, nuestros demonios internos, nuestras sombras, nuestro karma… y nos enseña también el modo de hacer ese sacrificio: a través de conectar con nuestro lado más salvaje, con esa fuerza erótica que va a destruir todo aquello que te impide crecer, todo aquello que te impide crear. 

Cuando aceptamos este sacrificio, ella viene a ofrecernos la Verdad, la Justicia, y nos regala a Sophia, la Sabiduría divina

Si abrazamos a la Madonna Negra tal y como es, veremos como su amor y su compasión son infinitos y nos transforman. Y cuando nosotras, nosotros, cambiamos, ella también se transforma, abriéndonos las puertas al conocimiento y las enseñanzas de otros aspectos del Divino Femenino.

El cuerpo, el templo de la Madonna Negra

El espacio sagrado, el templo, donde mora la Madonna Negra es el cuerpo y, en especial, el útero, tanto físico y energético, que es ese caldero donde vamos a poder hacer la transformación de la materia prima.

Los alquimistas lo llaman el alambique, que es el vaso donde se producen las operaciones alquímicas, y el atanor, que es horno que sostiene y calienta el vaso.

Las enseñanzas de la Madonna Negra son las bases del conocimiento espiritual, por eso su imagen aparece en múltiples tradiciones como la Diosa Velada, la Virgen Negra, la Hija Marginada, la novia llorona, la dama oscura del conocimiento… o la prostituta redimida.

En nuestra propia búsqueda de la Diosa, si puedes recordar tu propia experiencia, la primera llamada que sentimos a ir hacia su encuentro, comienza en la oscuridad, durante lo que los místicos llaman una noche oscura del alma, donde sentimos que todo nuestro mundo, todo lo que sentíamos como certeza en nuestra vida, se desmorona y nos encontramos ante un vacío existencial.

Es algo parecido a la ignorancia que siente un bebé cuando está en el útero de su madre. Allí está conectado con su origen divino y sabe que tiene que nacer al mundo, pero le da miedo porque ignora lo que se puede encontrar fuera. Una vez que nace, olvida de donde viene y comienza a sentir terror por su propio origen, que es ese vacío y esa oscuridad. 

Pero una de las enseñanzas del Divino Femenino dice así: «te ofreceré los tesoros de la oscuridad y las riquezas ocultas en los lugares secretos». Esos tesoros del Divino Femenino yacen en lo más profundo de nuestro ser, esperando a ser descubiertos. 

Por eso, en la oscuridad de la noche donde descubrimos el corazón de nuestra espiritualidad.

La semilla del crecimiento espiritual se siembra en la oscuridad del útero. Y es en este retorno al útero espiritual donde encontramos lo que los místicos llaman «la resplandeciente oscuridad»: el punto de retorno. Esta re-entrada al útero espiritual es tanto un renacimiento del alma como una muerte del ego

Tememos a la Madonna Negra porque proyectamos en ella todos nuestros miedos a lo desconocido y a lo que permanece oculto para nosotros, o no llegamos a entender. Desterramos su imagen hace mucho tiempo, pero Ella ha permanecido y la podemos encontrar en el rostro de Gaia, en la Madre Naturaleza, que nos recuerda constantemente nuestra soberanía creativa.

Cuando integramos la visión de la Madonna Negra como Gaia comenzamos también a recordar e integrar sus procesos, su naturaleza dual y su trabajo creativo. 

El hecho de considerarnos hombres y mujeres civilizados, nos ha hecho separarnos de las enseñanzas de la Madonna Negra. Y uno de los principales problemas es que despreciamos la materia, nuestro cuerpo y sus funciones fisiológicas básicas, que nos recuerda que somos materia. La comunión con la Madonna Negra se produce en el cuerpo, no es un proceso verbal ni intelectual… se produce en el cuerpo porque Ella es la materia prima.

Nuestro miedo a dejarnos llevar por el fuego abrasador de la ira, nuestro pavor a difuminarnos, a quedarnos sin estructura y a caer en el caso, es una reacción contra las enseñanzas de la Madonna Negra que, como materia negra que es, controla el destino del universo. 

La Madonna Negra es la dama que teje la telaraña de la creación que se forma en su propia matriz divina. No está separada de ella: la Madonna negra, el hilo, la telaraña y la matriz divina son una. La Madonna Negra es la Madre Creadora y en Ella están encerrados los misterios de la soberanía creativa, esperando a ser desvelados.

Qué es la Alquimia y cómo puede ayudarte en tu vida cotidiana

La Alquimia es el arte de la transformación y tiene una profunda capacidad para cambiar nuestra vida. En esta nueva Píldora de Sabiduría Femenina para la vida cotidiana hablamos de los principios básicos de la Alquimia, sus orígenes, sus símbolos principales y cómo podemos aplicarla en nuestro día a día.

Si tuviera que contestar de un modo fácil a la pregunta qué es la alquimia, te diría que «la alquimia es el arte de la transformación y tiene una profunda capacidad para cambiar nuestra vida».

La alquimia es la búsqueda de la transformación física, emocional, mental y espiritual. 

En una primera aproximación, este antiguo arte desarrolló procesos básicos de laboratorio para refinar y purificar los metales. La idea principal era transformar el plomo en oro. Estas operaciones fueron la base sobre las que se construyeron las ciencias modernas de la física, la química y la biología. 

Sin embargo, en una segunda aproximación a la alquimia nos podemos dar cuenta que esta iniciación a los procesos de laboratorio ocultan una filosofía más profunda, que llevan al autoconocimiento, la evolución espiritual y la iluminación personal.

Los manuscritos alquímicos están llenos de descripciones enigmáticas y símbolos misteriosos que representan varias sustancias y procesos. Estos textos y sus ilustraciones son difíciles de descifrar porque deliberadamente se han hecho complejos para desanimar al que no es digno de desentrañar sus secretos. 

La alquimia es un proceso que requiere pensamiento, reflexión y acción apropiada. 

Cuando empezamos a comprender las operaciones físicas, las que se dan en el mundo de la materia, los misterios filosóficos y espirituales más profundos se revelan. 

El alquimista progresa en esta búsqueda a través de la prueba y el error, aprendiendo tanto de los éxitos como de los fracasos. Es un proceso en espiral, en el que se vuelve a menudo donde se estaba anteriormente, pero armado con la experiencia sacada de situaciones pasadas y dispuestos a enfrentarse a retos antiguos de una manera distinta.

Los principios básicos de la Alquimia

Uno de los principios alquímicos más importante es Solve et Coagula, «disuelve y coagula». El proceso alquímico repite constantemente la separación y la unión de los elementos, soltándolos y juntándolos, para conseguir la purificación y el refinamiento del cuerpo, la mente y el alma. 

Otro principio alquímico esencial es «lo que es arriba, es abajo». La Tierra y sus criaturas reflejan directamente el funcionamiento del Universo, porque el microcosmos y el macrocosmos son uno. Por esta razón, la alquimia está directamente relacionada con la astrología.

El Sol y la Luna son sus dos personajes centrales, que representan los polos masculinos y femeninos del ser y de todo lo creado. El Sol y la Luna, junto con los cinco planetas restantes conocidos por los antiguos gobiernan los siete metales que van transformando el plomo en oro.

La complejidad del simbolismo alquímico es, a menudo, un reto para el iniciado. Una sola sustancia puede tener varios símbolos y un sólo símbolo puede tener múltiples significados. Aunque este simbolismo puede parecer inalcanzable al principio, tiene su lógica interna que se va revelando y se vuelve evidente con el tiempo. 

Como ocurre con el yin y el yang en la filosofía oriental, la dualidad y el equilibrio sexual son temas centrales en la tradición alquímica. El Rey y la Reina, símbolos humanos para el Sol y la Luna, representan las dos propiedades opuestas de la Materia Prima. Ellos nos muestran un amor apasionado. Durante las operaciones alquímicas se unen, se destruyen, se separan y se vuelven a reunir. 

Al final de la obra, el Rey y la Reina se funden en un único ser perfecto, un Andrógino, símbolo del equilibrio armónico entre los polos masculinos y femeninos. En la alquimia este ser andrógino recibe el nombre de la Piedra Filosofal, una sustancia que es capaz de transfrormar cualquier metal en oro y plata, a través de un proceso de  multiplicación. 

Este ser Andrógino aparece en el Evangelio de María Magdalena como Antrophos, y el amor pasional que existe entre el Rey y la Reina lo podemos encontrar en un texto antiquísimo, de tradición alquimista como es El Cantar de los Cantares.

Los orígenes de la Alquimia

La alquimia tiene su origen en Egipto como ritual espiritual relacionado con antiguos experimentos con los metales. El legendario filósofo egipcio Hermes Trimesgisto, el «tres veces grande», es uno de los alquimistas más antiguos conocidos. Está vinculado al dios egipcio Thot y al griego Hermes, y entre sus numerosos escritos destaca La Tabla Esmeralda, que es con diferencia el tratado más famoso de la sabiduría alquímica. 

La Tabla Esmeralda recoge la filosofía básica de la alquimia como sendero espiritual. Revela la unidad de toda materia, tanto en el microcosmos de la Tierra como en el Macrocosmo del Cielo. 

Los egipcios transmitieron las enseñanzas alquímicas a los griegos y los griegos crearon la visión clásica del universo que sitúa a la Tierra en el centro del cosmos y divide la materia en cuatro elementos: tierra, agua, fuego y aire. 

La alquimia también está presente en el taosimo y en la filosofía china, aunque hay algunas diferencias con la alquimia occidental. Los que la practicaban usaban cinco elementos básicos en vez de cuatro: la madera, el fuego, la tierra, el metal y el agua, y buscaban producir un elixir mágico que tenía como finalidad dotar al iniciado de la vida eterna. 

Durante la Edad Media, los alquimistas judíos y árabes introdujeron nuevos procedimientos de laboratorio y las enseñanzas alquímicas fueron creciendo y madurando. 

En este período, la alquimia se utilizaba de manera habitual para producir medicinas, tinturas, perfumes y otras sustancias, además de la búsqueda más ambiciosa de transformar el plomo en oro. 

Sin embargo, con la llegada de la Inquisición, por miedo a la persecución, los alquimistas comenzaron a ocultar aún más sus enseñanzas y utilizaron frecuentemente metáforas religiosas, junto a símbolos astrológicos, para explicar sus procesos, y se inspiraron en la historia de Adán y Eva o en episodios de la vida de Yeshua y María Magdalena (aunque en muchas ocasiones, la figura de María Magdalena aparece velada bajo la túnica de la Virgen María). 

Los dos principales personajes de la alquimia, el Rey y la Reina, tienen su origen en la estructura feudal de la Edad Media. Más tarde, las leyendas mitológicas se empiezan a agregar a las imágenes cristianas y feudales existentes. Los dioses y diosas clásicos representan los siete planetas y metales de la Antigüedad, enriqueciendo más aún la tradición visual de la alquimia con elaboradas y enigmáticas ilustraciones. 

La ciencia moderna adoptó las operaciones de laboratorio de los alquimistas y las técnicas de observación. Sin embargo, el desarrollo de la revolución industrial creó una distancia cada vez mayor entre la experimentación científica y la antigua sabiduría hermética. A esta separación, y a la consideración de la alquimia como simple magia y superstición, contribuyeron también los llamados «sopladores», personas a las que no les interesaba el sendero espiritual que ofrecía la alquimia y que lo único que buscaban era hacerse ricos rápidamente. 

A finales del siglo XIX, el renacimiento del ocultismo reavivó el interés por la alquimia y, en el siglo XX, psicoanalístas como Jung la utilizarían como un modelo para el desarrollo psicológico humano. 

Y es que lo que realmente caracteriza a la alquimia es precisamente esto: busca la transformación personal, transforman nuestro plomo en otro. La creación del oro es secundaria ante la búsqueda del conocimiento de uno mismo que empieza cuando decidimos adentrarnos en la sabiduría alquímica desde un corazón puro. 

La Alquimia en la vida cotidiana

La alquimia busca unir la materia y el espíritu, el alma y el cuerpo. Entonces, la clave de la búsqueda alquímica se encuentra en el mundo real, en nuestro día a día.

Lo que es arriba es abajo, y también, lo que es dentro, es fuera. En el microcosmos de nuestro cuerpo reproducimos el macrocosmos de la Tierra y el Cielo. En nuestro cuerpo danzan los elementos y los planetas.

La alquimia nos ofrece herramientas para transformar nuestro plomo, que son nuestras sombras, heridas, patrones limitantes, emociones densas, en oro.

Nos ayuda a entender el tango a dos que realizan nuestras polaridades internas. Abrazar nuestro femenino interno y sanar nuestro masculino interno. O, abrazar nuestro masculino interno y sanar nuestro femenino interno. Para llevarnos a abrazar nuestra soberanía creativa a través de la magia y la alquimia sexual.

Si te interesa profundizar en las enseñanzas ancestrales de la alquimia, te invito a conocer las clases online en directo de Danza Küyen, donde vamos a llevar al cuerpo y activarlas en nosotras, para conocer cómo podemos llevarnos a la transformación personal. 

Lo que Venus nos enseña en su retrogradación en Leo

El 22 de julio, Venus comienza su retrogradación. Desde nuestra visión aquí en la Tierra, parecerá como si la Diosa caminara hacia atrás, volviendo sobre sus pasos. Este movimiento es muy importante dentro del dibujo de su geometría sagrada: la Rosa Mystica, porque le lleva a cerrar el pétalo en Capricornio, que ha estado dibujando durante los últimos 18 meses, y a abrir el pétalo en Leo.

La semana pasada te comentaba que Venus había entrado en Leo y que su llegada al signo del león suponía el final del dibujo de un pétalo dentro de la Rosa Mystica, el pétalo en Capricornio, y el inicio de un nuevo viaje de iniciación de 18 meses.

Hasta el 13 de agosto, que se produzca la unión con el Sol, Venus realizará un movimiento retrógrado, una danza de cierre de un ciclo y apertura de uno nuevo donde se producirá un traspaso de saberes: se integra el pétalo en Capricornio y la sabiduría que nos ha traído, y la diosa se transforma para abrazar un nuevo propósito.
 
El pétalo en Leo es un llamado a todas aquellas mujeres que van a liderar desde el corazón este resurgir del Divino Femenino. Un rugido a despertar el corazón alquímico femenino.
 
Durante su movimiento de retrogradación en Leo, Venus va a estar acompañada de Marte y Lilith, y mantendrá conversaciones con Quirón en Aries, y con Júpiter y Urano en Tauro, invitándonos a realizar un profundo trabajo de sombra, para que tomemos conciencia de:
 
✨ qué es lo que nos impide brillar desde nuestra autenticidad,
✨ que inseguridades afloran cada vez que decido mostrarme
✨ qué heridas de mi infancia y mi adolescencia piden ser miradas
✨ qué miedos nos acorazan y nos impiden hablar de nuestros dones y talentos.
✨ qué dolor guarda mi corazón que no le permite abrirse a la vida, al goce, al amor y al placer.

Desde su entrada en Leo, el 5 de junio, hasta su salida definitiva en octubre, Venus nos ofrece dos meses para ir hacia adentro y hacernos cargo de nuestras luces y nuestras sombras, rompiendo los condicionamientos que nosotras mismas nos hemos impuesto y aquellos que vienen de los espejismos culturales y colectivos.
 
Lo que nos muestra es un adelanto del proceso de transformación que viviremos durante el viaje de iniciación de 18 meses al que nos está invitando:
 
✨ Su cuadratura a Júpiter en Tauro mostrará mostrará aquello que impide la expansión de nosotras mismas, nuestros proyectos, relaciones…. y los patrones de escasez que nos impiden crear abundancia y prosperidad en todas las áreas de nuestra vida.
 
✨ La cuadratura a Urano en Tauro nos hará tomar conciencia del miedo que tenemos a hacerlo diferente, a romper con los cánones establecidos, y nos pondrá de frente con nuestras propias máscaras… aquellas que creamos en nuestra más tierna infancia para sentirnos amadas, y que hoy debemos transformar para abrazar nuestra soberanía.
 
✨ El trígono a Quirón en Aries nos ofrece una oportunidad de sanación fluida, sutil y armoniosa, vivida desde los códigos venusinos; es decir, desde el placer y el gozo de saber
que somos responsables de la vida que creamos y que tenemos todas las herramientas que necesitas para transformarnos sin que esto suponga desgarrarnos y rompernos en mil pedazos.

 
Durante el dibujo de su pétalo enLeo, Venus nos va a invitar a despertar nuestro poder y soberanía creativa, a través del retorno a nuestra conciencia solar femenina.
 
Para eso, nos pedirá realizar un trabajo de sombra profundo. Su finalidad es que descubramos todo aquello que nos impide abrir nuestro corazón, conectar con nuestra autenticidad, nuestro brillo personal y nuestra expresión creativa.
 
Junto a Venus, Lilith es la gran protagonista de este pétalo de la Rosa Mystica en Leo.
 
Si Venus implica habitar el cuerpo y la sabiduría femenina, activar nuestro fuego creativo y encarnar la coherencia de nuestro corazón con autenticidad y coraje. Lilith nos inicia en la magia y la alquimia sexual, y nos invita a abrazar el poder de nuestras sombras para transmutar todo aquello que nos desconecta de la fuente creativa.
 
Además, Lilith nos ayudará a darnos cuenta que esta sanación que nos propone el viaje de iniciación de la Diosa, va más allá de nosotras mismas e influye en nuestro linaje femenino, porque nos da la oportunidad de dar voz a todas aquellas mujeres de nuestro árbol familiar que no tuvieron la oportunidad de brillar por sus talentos, fueron silenciadas por sus opiniones trasgresoras, no pudieron vivir una sexualidad libre o relaciones fuera de lo establecido.
 
Si estás sintiendo un bloqueo en tu voz, en la expresión de tus dones y talentos, si sientes miedo a mostrarte o caes en la comparación constante y eso influye en tu autoestima y tu valor como mujer… puede que el dolor de tus ancestras esté hablando a través de ti.
 
Este pétalo en Leo es una oportunidad de liberarlas. Porque al sanar tú, las sanas a ellas…. y permites que la Gran Madre retorne a su trono.
 
El tiempo ha llegado.

Te invito a ser parte de La Danza de Venus. El pétalo en Leo comienza el 13 de agosto. Nos reuniremos un sábado al mes para viajar junto a Venus en esta iniciación a los misterios femeninos.