La luna y el cuerpo | Prácticas corporales para la luna llena

La luna y el cuerpo

En esta píldora de sabiduría femenina para la vida cotidiana quiero profundizar un poquito en los cambios que experimenta nuestro cuerpo durante las diferentes fases de la luna. Y proponerte las mejores prácticas para realizar los días de luna llena.


Hoy es luna llena y para mi es un día especial. Me gusta respetar la influencia de la luna en mis prácticas diarias. Por un lado, porque mirar al cielo y seguir el ciclo lunar me recuerda que mi naturaleza es cíclica también. Y me da la oportunidad de observar, amar y respetar mi ciclo cambiante. Y, por otro lado, me hace recordar que formo parte de algo más grande que mi día a día. Marcado por el estrés y el atropellado de imágenes, ruidos, olores y sabores que pasan a una velocidad de vértigo…Volver la mirada a la luna me hace parar y volver a conectar con mi esencia.

Hace unas semanas, te compartía el saludo a la luna (Chandra Namaskara) como práctica para conectar con la energía receptiva y femenina que simboliza la luna. En esta píldora de sabiduría femenina para la vida cotidiana quiero profundizar un poquito más en los cambios que experimenta nuestro cuerpo durante las diferentes fases de la luna. Y proponerte las mejores prácticas para realizar los días de luna llena.

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Te dejo también una playlist de música especial para danzar con la luna llena.


El agua es el principal componte de nuestro cuerpo. Y la luna influye en nuestras aguas internas al igual que lo hace en las aguas de nuestro planeta, dando forma a las mareas. A lo largo de sus diferentes fases experimentamos cambios emocionales, diferencias en la capacidad de concentración, en nuestra respiración y también en la flexibilidad de nuestro cuerpo.

la luna llena y las emociones

En concreto, la fase de la luna llena se relaciona con la inhalación y con el momento en que la energía vital o prana está en su punto más álgido. Es una fase de expansión total, donde nos podemos llegar a sentir muy energéticas y, a la vez, muy sensibles y emocionales.

La naturaleza del agua es fluir. Su inteligencia radica en encontrar siempre el camino más corto entre dos puntos. Si el agua no fluye, se estanca. De igual manera, si nuestras emociones no fluyen, nos estancamos y nos bloqueamos. La emoción es un movimiento que nos impulsa a la acción y, paradójicamente, por temor lo refrenamos.

Durante esta fase el Sol está iluminando a la Luna. Del mismo modo, nuestras emociones, nuestras partes más escondidas, misteriosa y ocultas, también quedan iluminadas. Nuestro mundo interior se revela y emerge a la luz de la conciencia. Si internamente hay paz y bienestar, la luna llena es un momento de gran éxtasis. Por el contrario, si tenemos cuestiones no resueltas (si hay una relación que ya no nos gusta en su dinámica o nos sentimos saturadas de trabajo, queremos mudarnos, o necesitamos hacer un cambio importante en nuestra vida), nuestras emociones estarán más exaltadas que nunca y nos sentiremos más irritables, intolerantes y, probablemente, nos costará conciliar el sueño.

Todos nuestros instintos están exacerbados para mostrarnos aquello que ya no tiene lugar en nuestra vida.

Por eso, la luna llena es el momento de mayor intensidad emocional. Es una oportunidad de observarnos internamente para darnos cuanta qué nos está pasando. Cuán ordenada o desordenada está nuestra casa interior –nuestro cuerpo– y nuestro mundo emocional.

En la luna llena se nos muestra como un espejo lo que nos sucede. Refleja nuestro mundo interior. Muchas veces podemos sentirnos frustradas ya que podemos apreciar la brecha entre lo que deseamos y lo que realmente estamos manifestando. Entre lo que nos gustaría lograr y lo que realmente logramos.

La luna llena es un momento de observar sin juzgar, de aceptar activamente, para poder empezar a tomar responsabilidad sobre nuestras emociones y acomodar lo que no nos gusta de nuestra vida. Es momento de mirar la verdad desnuda de nuestros sentimientos, de los mensajes que nos envía nuestra alma, de lo que yace en nuestro inconsciente, de nuestra capacidad de ser fértiles ante lo que acontece, de observar cuán conectadas estamos con la energía creativa, con nuestro hogar, nuestra madre interna, con lo femenino y con la vulnerabilidad, y también con el hecho de estar más susceptible a los estados de ánimo de otras personas… porque en este momento somos muy permeables a los demás.

la luna llena y el cuerpo

Al mismo tiempo, es un momento en el que nuestra concentración creativa es muy potente y nuestro cuerpo tiene una mayor flexibilidad. Esto, unido a que probablemente podemos estar reteniendo líquidos y sentirnos algo hinchadas, hace que la práctica corporal en esta etapa deba ser muy consciente y suave.

En algunas tradiciones yógicas, los días de luna llena se deja la práctica física a un lado y recomiendan dedicar estos momentos a la meditación y a la practica lenta, consciente y calmada.

Sé prudente y respetuosa con tu cuerpo, no lo sometas a grandes esfuerzos los días de luna llena.

Es un día maravilloso para centrar tu energía y conectar contigo a través de la meditación. Cuando meditamos se apagan nuestros cinco sentidos y se enciende el sentido interno. De este modo, logramos centrarnos, equilibrarnos, tomar distancia de los hechos, encontrar la manera de estar en paz y tomar conciencia de las emociones que están emergiendo en este momento. Que nos están dando mucha información sobre nosotras mismas y la capacidad que tenemos de conectar con nuestra energía creativa y nuestra capacidad de manifestación.

Durante estos días medita en la profunda experiencia de volver a casa, a tu útero, a tu centro de creación y poder… a tu esencia…

la luna llena y las mejores prácticas corporales

Las mejores prácticas corporales que puedes realizar durante los días de luna llena, además del saludo a la luna o Chandra Namaskara (que te recomiendo realizar bajo la luz de la luna), es la oración con el cuerpo o Body Prayer, una secuencia suave de cantos de mantras acompañada de mudras.

También te recomiendo las danzas con el elemento agua, que te van a permitir mover las emociones estancadas y aquellas emociones densas que puedan estar surgiendo en esta fase de la luna, para canalizarlas y darles una vía de salida.

Todas estas prácticas las encuentras en La Espiral, la membresía de la Rosa Mística, y puedes realizarlas a tu ritmo, en casa, según tus necesidades cíclicas y cambiantes.

este artículo se publicó por primera vez el 24 de febrero de 2021.

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Cuatro rituales para fortalecer el amor propio

En vísperas de celebrar el día de San Valentín te traigo una nueva píldora de sabiduría femenina para la vida cotidiana en la que te propongo cuatro rituales para cuidarte de forma regular y potenciar el amor hacia ti misma.

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Dice el Dalai Lama que si no amas quien eres, no podrás amar a otros, y que si no sientes compasión por ti misma, no podrás sentir compasión por otros.

¿Te imaginas cómo podría ser nuestra vida si nos amásemos incondicionalmente, si dedicáramos un tiempo a volver hacia el interior de nosotras mismas para darnos todo el amor que necesitamos y, desde ahí, salir al mundo con el corazón abierto dispuesto a amar a otros?

No es fácil y te confieso que yo sigo en el camino de lograrlo. No siempre soy capaz de amarme incondicionalmente porque el diálogo que establecen mi niña interior herida y mi madre interna a veces no es bonito, y se parece más a las rabietas que cogía de pequeña cuando no conseguía lo que quería… aunque no fuera bueno para mi.

Por eso en esta nueva píldora de sabiduría femenina te propongo cuatro rituales que suelen estar en mi kit de supervivencia emocional y que me ayudan a avanzar un poquito más en mi autocuidado, y también a fortalecer el amor hacia mi misma para poder después abrirme a los demás desde un lugar más feliz y placentero.

Ritual 1. Reserva un tiempo placentero para ti misma

Este ritual es para todas aquellas que tenemos poco tiempo. Precisamente por fatal de tiempo solemos sacrificar y relegar a un segundo plano todas aquellas cosas que realmente nos nutren y nos hacen sentir bien. Así que en este ritual te propongo creer un espacio de tiempo para una actividad placentera.

Lo importante es que seas regular con este espacio de tiempo. Por ejemplo, una o dos veces por semana, entre una y dos horas, haz únicamente aquello que te proporciona alegría, armonía y bienestar.

Es importante que pienses que este espacio te lo das porque sientes que realmente lo mereces. En mi caso, te cuento que todas las mañanas, antes de desayunar, realizo mi práctica corporal diaria: me estiro, hago ejercicios para activar mi útero y los elementos en mi y bailo un poquito. Estas prácticas son, además, las que comparto en La Espiral de la Rosa Mística, la membresía de la Escuela.

También he vuelto de nuevo a mis clases de flamenco, dos veces por semana. Hacía mucho tiempo, como unos cinco años, que no bailaba flamenco. Me había dedicado a otras modalidades, como la danza contemporánea o la formación en danza Reajuste Vital, e incluso había dedicado mucho tiempo a crear mi propia herramienta de trabajo corporal: la Danza Küyen®.

Pero ahora sentía que deseaba un espacio donde compartir con otras personas y que no fuera yo la que nutriera a otras mujeres, sino dejar que otra mujer me nutriera a mi. Sigo ofreciendo clases de Danza Küyen® y, por supuesto, forma parte de mi práctica diaria, pero dos días a la semana me dejo nutrir por otra mujer… y además el flamenco despierta mi fuego y mi energía yang, que es algo que este año necesito mucho.

¿Qué es lo que te gusta hacer a ti que te saca de la rutina y hace que vuelvas a conectar contigo misma? Puede ser un baño de bosque, leer un buen libro… cualquier cosa que te conecte de nuevo contigo misma desde el placer.  

Ritual 2. Ten una cita contigo misma

Con el placer también está relacionado el segundo ritual que hoy te propongo. Reserva una noche solo para ti. Prepárate una cena exquisita, enciende velas e incienso, descorcha una buena botella de vino y escucha tu música favorita mientras te deleitas en todos tus sentidos.

Dedica el mismo mimo que pondríamos si fueras la anfitriona de una cena en tu casa y estuvieras preparando toda la velada para unos amigos o un amante.

Al terminar la cena, puedes prepararte un baño caliente con sales, aceites esenciales y pétalos de rosa, y seguir deleitando tus sentidos mientras piensas en todas aquellas cosas que te gustan de ti. Poner atención en nosotras mismas y abrir todos nuestros sentidos al placer nos ayuda a amarnos y apreciarnos mucho más.

Te dejo esta playlist de música especial para conectar con el placer.

Ritual 3. Materializa un sueño

El tercer ritual que te propongo es que pongas en acción un deseo que llevas mucho tiempo soñando pero que no has llegado a materializar aún.

¿Deseas aprender algo nuevo, como cocinar o meditar? ¿Quieres pintar un cuadro o aprender a tocar un instrumento musical? ¿Apuntarte a clases de canto para abrir el quinto chakra y conectar con tu voz auténtica? ¿Planificar un viaje?

Nuestra mente es una maestra en generar excusas para no hacer algo que puede llegar a ser muy positivo para nosotras mismas y el miedo nos paraliza y no nos permite salir de nuestra zona de confort. Te invito a dejar de aplazar tus sueños y permitirte sentirte merecedora de cumplirlos, por pequeños que creas que son.

Ritual 4. Agenda tu tiempo de autocuidado

Y, por último, te propongo que realices actividades que te proporcionen bienestar a un nivel físico, emocional y espiritual.

Aquí puedes englobar tanto actividades agradables, como ir a un concierto o programar un masaje con cierta regularidad, como aspectos no tan agradables, como la cita anual con el dentista o esa citología que sabes hace tiempo que tienes que hacerte.

Puedes crear un programa de autocuidado en el que vayas alternando aspectos importantes, pero no muy placenteros (ir al dentista) con otras actividades que sí te aportan mucho placer, como el masaje o quedar con tus amigas una vez a la semana. Si además en este programa incorporas la ciclicidad y atiendes las necesidades cambiantes de cada una de las fases de tu ciclo, este ritual de autoamor que te propongo tendrá mucha más fuerza y será mucho más efectivo. Ya sabes que para ayudarte a llevar a cabo este plan tienes el e-book Autocuidado cíclico que puedes descargar de forma gratuita aquí.

Para finalizar…

Estos rituales son propuestas que te ayudarán a cultivar el amor hacia ti misma. Puedes practicar aquel que ahora resuene contigo y volver a esta píldora de sabiduría femenina cada vez que la necesites.

Cultivar estos rituales también supone establecer un compromiso contigo misma para que seas disciplinada y perseverante… y flexible a la vez. Tampoco se trata de caer en la rigidez porque entonces estaríamos dejándonos de amar de nuevo… y este no es el objetivo de estos rituales que hoy te propongo.

No intentes hacerlos todos de golpe. Elige uno hoy, el que más resuene contigo en este momento de tu vida, y ponlo en práctica. Puedes también hacer una variación del ritual e incluso crear uno nuevo… ¡Pon a tu niña interior mágica en acción y juega! Amarnos a nosotras mimas comienza por disfrutar y gozar del proceso y del momento presente.

Aprende sobre Geometría Sagrada


este artículo se publicó por primera vez el 12 de febrero de 2021

Geometría Sagrada en movimiento

La Geometría Sagrada hace referencia al conjunto de formas y patrones geométricos que se encuentran presentes en la naturaleza. Trabajar con ella nos conecta con la esencia divina y, al llevarla al cuerpo en movimiento, anclamos en nosotras su frecuencia de alta vibración.


¿Que es la Geometria sagrada?


La Geometría Sagrada es el lenguaje de la vida, de la belleza, de la armonía y del amor. Son las relaciones armónicas, las leyes orgánicas, los ritmos, la base sobre la cual se ha creado todo lo que existe. La geometría del universo es el espacio donde la materia y la mente, lo físico y lo espiritual, lo manifiesto y lo no manifestado, lo finito y lo ilimitado se entrelazan.

Así como el plano de un arquitecto nos da una idea del diseño y la ubicación de un casa, la Geometría Sagrada nos dice el diseño, la ubicación espacial del planeta Tierra, el universo, nuestro cuerpo y todo lo que lo integra.

Son los mapas a través de los cuales podemos entender cómo funcionamos, cómo funciona la vida. La geometría divina se haya en nosotros y en todo lo que nos rodea.

En la naturaleza la podremos encontrar en las plantas, flores, caracoles, secuencia de reproducción de los animales, en todos nuestros procesos biológicos –desde el desarrollo de una nueva vida, de un embrión, la reproducción celular y hasta en las moléculas de carbono de tu cuerpo y tu ADN–.

Geometría sagrada: símbolos y significados


La palabra «Geometría» tiene su origen en la palabra griega Geo que significa «Tierra» y Metria que significa «medida», lo que vendría a ser «la medida de la tierra». Un arte que se utilizaba para la medición de los terrenos de labranza en la antigüedad.

«Sagrado» es todo aquello que se considera merecedor de adoración u objeto de culto por atribuírsele un carácter de divinidad o una relación con lo divino.

Por tanto, la Geometría Sagrada es el estudio de las proporciones y medidas de la materia y la energía en relación con el principio de sustentabilidad que crea la vida.

Tipos de Geometria Sagrada


Estos símbolos de poder engloban diferentes tipos de figuras geométricas como la Espiral, el Toroide, la Vesica Piscis, por citar solo algunos .

La espiral


La Espiral es la geometría básica de la vida y puedes observarla en todo lo que es creado por la Madre Tierra: desde la secuencia de nuestro propio ADN hasta una caracola. Todo en el universo gira en espiral y toda creación parte de este movimiento.


Decía Platón que, a veces, Dios geometriza. Y es que la Espiral de Fibonacci está relacionada con la Proporción Áurea o la Divina Proporción y el Número Phi, presente en los pétalos de las rosas, en la forma de las galaxias y en muchas grandes obras humanas, como La Gioconda de Leonardo Da Vinci, las pirámides de Egipto o las partituras de Debussy.

el toroide


El Toroide es una de las formas esenciales de la geometría divina. Esta imagen representa gráficamente el proceso por el cual toda la energía, cuando está correctamente alineada, está continuamente en movimiento armónico y cíclico arriba, abajo y alrededor, entre el espíritu y la materia.

Cuando estamos en armonía con nosotros mismos y con lo que nos rodea, estamos moviendo nuestra energía de forma toroidal, estamos en equilibrio, en coherencia y satisfechos con nuestras acciones.

Cuando no estamos en armonía con la energía universal, entonces la energía deja de fluir y la situación se vuelve «estancada» y no es saludable, no hay movimiento.

la vesica piscis

Para la Geometría Sagrada, la Vesica Piscis es la forma que da a luz a todas las formas: representa a las dos energías que crean la vida (femenina y masculina) unidas en perfecto equilibrio, con un «hilo» que conecta el corazón de cada una de ellas.

De este modo, el símbolo de la Vesica Piscis está formada por dos círculos entrelazados del mismo radio, que se superponen una dentro del otro, dando lugar a una figura geométrica: el óvalo.

Antiguas tradiciones, como los pitagóricos y los sufíes, consideran a la Vesica Pisicis el símbolo de las llamas gemelas: un mismo ser que se divide en polaridades opuestas para tomar dos cuerpos diferentes, pero siempre están conectados en el alma.

Beneficios de utilizar la Geometría sagrada en tu vida cotidiana

La Geometría Sagrada es uno de los conocimientos fundamentales para acercarnos al despertar de la consciencia.

La proporción áurea, las proporciones geométricas y las figuras de geometría se utilizaron en la construcción y diseño de las arquitectura egipcia, india, griega y romana. Los constructores de las antiguas catedrales también utilizaron geometría simbólica en sus diseños y la mayor parte de las obras de arte del Renacimiento y el Barroco tomaron como punto de partida estas proporciones divinas.

En tu vida cotidiana, una mayor comprensión de la Geometría Sagrada puede traerte muchos beneficios:

Mejorar tu comprensión espacial y capacidad visual

Varios proyectos necesitan la aptitud de imaginar lo que se requiere dentro de un espacio preciso, como planificar la remodelación de una vivienda, saber qué tamaño de automóvil adquirir o la planificación de un nuevo jardín. Entrenar la visualización de formas y dimensiones tridimensionales va a ayudarte con tareas como estas.

Estimular la consciencia personal y favorecer la concentración en la meditación

Los mandalas son formas particulares usadas por distintas tradiciones para representar el universo y accionar como ayudas para la meditación. Puedes trabajar con mandalas (por ejemplo, el mandala de la flor de la vida) para contribuir a tu propio hábito de meditación. O sencillamente puede adornar con símbolos que sean significativos para ti y colocarlos como recordatorios en toda su casa.

Favorecer la apreciación del universo y la naturaleza

Cuando estés familiarizado con algunas de las formas simples, vas a comenzar a conocer cómo se repiten en varios sitios de la naturaleza y las construcciones hechas por el hombre.

Mejorar el pensamiento tridimensional

Si trabajas en diseño gráfico, producción de películas o algún otro tipo de trabajo de diseño, el saber de los patrones geométricos sagrados te va a ayudar a entrenar tu cerebro para ver patrones y mejorar tus diseños y capacidades tridimensionales. Estudiar las formas y patrones sagrados puede ofrecerte ciertas ideas espectaculares para tu próximo emprendimiento.

Involucrar todo tu cerebro

El lado izquierdo de nuestro cerebro tiende a ser el lado más lógico y técnico, en tanto que el cerebro derecho tiende a ser el lado creativo e intuitivo. Para la mayor parte de nosotros, un lado del cerebro tiende a ser dominante. La naturaleza de la geometría implica los dos lados de su cerebro y los asiste para trabajar juntos. Esto puede hacerte más efectivo en la vida en general.

Geometria sagrada en movimiento

La Geometría Sagrada es la red energética «invisible» que da acceso a niveles superiores de conciencia. A través de estas entradas de energía, nos introducimos a nuevas formas de vernos a nosotros mismos, nuestro mundo y la naturaleza de la realidad. 

Es como si, de repente, recibiéramos un nuevo par de anteojos y la vida entrara en un nuevo enfoque y percepción.

De este modo, puedes pensar en la Geometría Sagrada como una llave que abre una nueva «sala de conciencia». Cada llave tiene una forma diferente y el patrón es específico para una puerta en particular. 

Al abrirla, no solo podemos elevar nuestra vibración. También podemos activar el ADN cristalino y el ADN del alma, apoyando nuestro proceso de ascensión.

Cuando esta Geometría Sagrada la llevamos al cuerpo y al movimiento, a través de secuencias que se van repitiendo, anclamos este ADN y su vibración de una manera profunda en nuestra memoria celular.

Esto era lo que hacían las Sacerdotisas de la Diosa en los templos y en sus iniciaciones, conectando así el Cielo con la Tierra.

beneficios de practicar geometría sagrada en movimiento

Practicar geometría sagrada en movimiento trae múltiples beneficios a tu vida diaria.

  • Conectarás contigo de una manera amorosa y sencilla
  • Te sentirás más centrada y en paz contigo misma
  • Te conectarás con el placer de vivir
  • Te sintonizarás con una nueva forma de vivir acorde con las leyes de la armonía
  • Aprenderás a usar tu cuerpo y tu mente en tu beneficio
  • Conocerás todos los recursos de los que dispones para ser feliz

En La Espiral de la Rosa Mística tienes a tu disposición prácticas especiales de geometría sagrada en movimiento para incorporal todos estos beneficios a tu vida diaria.


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este artículo se ha redactado con la aportación inestimable de susana shima, de mowna. escuela de geometría sagrada.